Constitución mexicana de 1824
El 4 de octubre de 1824 y luego de la caída del Primer Imperio Mexicano entró en vigencia la primera Constitución de México. Ese momento marcó el nacimiento de la república que comenzó llamándose Estados Unidos Mexicanos.
El antecedente principal de la Constitución mexicana de 1824 fue el Acta Constitutiva de la Federación Mexicana, firmada el 31 de enero de 1824 y que involucró el compromiso de los estados independientes de constituir una sola nación. Este documento contenía los principales postulados que luego incluiría la Constitución de 1824.
Otro documento que influiría en la formulación de la Constitución mexicana fue la Constitución de Estados Unidos –también llamada Constitución de Filadelfia–, sobre todo en lo referente a la organización federativa y cómo sería la representación de los estados en la nueva república. También la Constitución de Cádiz sirvió como aporte para la Constitución mexicana de 1824 en lo que respecta a los postulados independentistas de las Américas.
El contenido de la Constitución de México estaba dividido en siete títulos y 171 artículos y en ella se plasmaban los principios que regirían a los Estados Unidos de México de allí en adelante. Sobre el funcionamiento base de la república mexicana, la Constitución planteaba una división de los poderes públicos en Ejecutivo, Judicial y Legislativo.
Apenas dos días antes de la entrada en vigencia de la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos, el 2 de octubre de 1824, se declaró a Guadalupe Victoria como el primer presidente. En ese entonces, asumió el gobierno de forma interina hasta marzo de 1825 y su periodo presidencial, tal como lo establecía la Constitución, tuvo una duración de cuatro años a partir de abril de 1825 y hasta 1829.
Cronología de la elaboración de la Constitución
La Constitución de Apatzingán: en 1814 fue redactado el Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana, esto luego de la convocatoria que hiciera el líder independentista José María Morelos de redactar un proyecto de Constitución para lo que sería la nueva república mexicana. Puesto que el documento surgió de un congreso realizado en Apatzingán, a este documento también se le conoce como Constitución de Apatzingán. A pesar de este movimiento para la redacción de la Constitución, este documento no fue promulgado ni puesto en vigencia.
El gobierno provisional: con la caída del Primer Imperio Mexicano y la abdicación de Agustín de Iturbide, fue necesaria la promulgación de un gobierno provisional establecido bajo la figura de un Supremo Poder Ejecutivo. Durante este gobierno provisional se convocó al Congreso Constituyente para la redacción de la carta magna de México.
El Congreso Constituyente: el 30 de junio de 1823 se hizo la convocatoria para la instalación del Congreso Constituyente que estaba presidido por el Poder Ejecutivo, conformado por Guadalupe Victoria, Nicolás Bravo y Pedro Celestino Negrete.
Inicio de sesiones: el Congreso Constituyente comenzó sus sesiones para la redacción de la carta magna el 7 de noviembre de 1823. Estas sesiones estaban marcadas por los conflictos entre los federalistas y los centralistas.
Primer borrador: el proyecto constituyentista de México tuvo un primer borrador que fue puesto para el debate en el congreso el 1 de abril de 1824. En este primer documento se presentaba un Supremo Poder Ejecutivo que estaría conformado por tres personas.
Segundo borrador: debido a las discusiones por lo planteado en el primer borrador, sobre todo por el establecimiento del Supremo Poder Ejecutivo, se designó una comisión para la redacción de un segundo borrador que fue presentado el 28 de junio de 1824 y que planteaba el poder ejecutivo en manos de un presidente y un vicepresidente.
Principios de la Constitución mexicana de 1824
División político-administrativa: en esta primera Constitución mexicana se dividía la república en cinco territorios (conformados por 4 dependencias del centro y un distrito federal) y 19 estados, todos ellos con una autoridad electa. Estos primeros cinco territorios que componían la república fueron Tlaxcala, Colima, Alta California, Baja California y Santa Fe de Nuevo México
Soberanía: mediante a Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos se proclama la soberanía de este país centroamericano. Esta soberanía se sustentaba en la independencia del yugo español y de cualquier otra nación que quisiera disponer sobre su territorio, organización y estructura social.
Sistema federal de gobierno: a partir de la Constitución de 1824 se proclama a México como una República Federativa. Este sistema de gobierno implica la distribución del poder entre los diferentes estados que conformaban la república y la inexistencia de un poder único o absoluto. Eran los tres poderes públicos los que representaría la unión entre los estados.
El sistema federal de gobierno estuvo en funcionamiento hasta la derogación de la Constitución en 1835, cuando se da paso a un sistema centralista.
Distribución de los poderes: los poderes públicos consagrados en la Constitución eran el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial. El poder Ejecutivo estaba conformado por el presidente de la república y, ante su ausencia, sería el vicepresidente de la república quien asumiría las riendas del país.
El poder Legislativo se concentraba en el Congreso Nacional, que incluía una cámara de senadores y otra de diputados. Mientras que el poder Judicial estaba en manos de una Corte Suprema de Justicia compuesta por 11 ministros y un fiscal.
Unificación religiosa: en la Constitución mexicana de 1824 se decreta al catolicismo como la una única corriente religiosa de corte oficial y se prohíbe la práctica de cualquier otra religión.
Derogación de la Constitución de 1824
La existencia de una república federativa generó conflictividades y diferencias entre los 19 estados parte, por lo que se hacía cada vez más difícil generar un marco legal y una estructura social homogéneos. Ante esta situación, se planteó la necesidad de un gobierno único que permitiera la ostentación de un poder central para mantener la unión de la república.
Estas circunstancias estuvieron involucradas en que, en 1835, se derogara la Constitución de 1824. Es el 30 de diciembre de 1836 y bajo la presidencia interina de José Justo Corro, cuando entraron en vigor las llamadas Siete leyes, que pasarían a sustituir a la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos.
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