Chalota

La  Chalota (Allium ascalonicum), también conocida como cebolla escalonia, cebolleta escalónica, echalote, cebolla macho, entre otras, es una planta que pertenece a la familia de las  Alliaceae; tiene mucha semejanza con la cebolla común, y al igual que esta última, su parte comestible es el bulbo; utilizado en la preparación de variadas comidas. Es originaria de Asia central y distribuida por muchas partes del mundo.

La Chalota

La morfología de La Chalota

Hojas

Sus hojas, que salen del bulbo, son cilíndricas, huecas y verdes. Es una planta bulbosa perenne, aunque cultivada como anual

Floración

En la floración se forma una especie de capuchón en los extremos de las hojas, cubiertos por tres brácteas. Al abrirse éstas, exponen una inflorescencia en umbela, compuesta por muchas florescillas, que pueden ser de color blanco o verdosas.

 

Sabor de la Chalota

Su sabor es una especie de combinación suave entre el sabor de la cebolla y el ajo; por lo que es realmente valorada en recetas culinarias.

Recetas con Chalota

Diferencias de la Chalota y la cebolla

La principal diferencia entre estas dos plantas tan parecidas es que la cebolla cuenta con un solo bulbo; mientras que en la Chalota se desarrollan varios bulbos de menor tamaño en cada planta.

Rendimientos y rentabilidad

La Chalota es una planta de altos rendimientos, por lo que es ampliamente explotada, ya que sumada a esta característica (alta rentabilidad) su demanda también es alta; por las razones arriba mencionadas.

Requerimientos de suelo y abonado

Entre los requerimientos de la Chalota está un suelo neutro; no tolera pH´s alcalinos, ni muy ácidos, y además deben ser ricos en materia orgánica. En este último aspecto se debe ser muy precavido, ya que es una planta muy susceptible a los excesos de nitrógeno; razón por  la que se desaconseja el abono con estiércol. Necesita suelos permeables bien aireados, de textura Franco arenosa. Requiere de cantidades de potasio y fósforo suficientes para el desarrollo de su bulbo.

Requerimientos de clima

La Chalota es de clima templado frío, que soporta heladas. Como es típico en las hortalizas, necesita suficiente exposición solar para un desarrollo óptimo.

En su fase de crecimiento vegetativo requiere de temperaturas nocturnas entre 8 a 20 ºC, y temperaturas medias anuales de 13 a 24 ºC. Para formar el bulbo necesita temperaturas medias diarias de 18 a 20 ºC y buen contenido de materia orgánica. No soporta tampoco pH´s alcalinos ni muy ácidos (prefieren los neutros).

Preparación del terreno

El cultivo de la Chalota debe iniciarse con la preparación del terreno. Se debe limpiar bien el suelo, quitando de él cualquier desperdicio, piedras, trazos de cualquier material, o malezas, los cuales puedan interferir con el sano desarrollo de lo que será una nueva planta. Igualmente, el terreno debe estar bien mullido para que las nuevas raíces salientes puedan tener libertad de movimiento y un buen desarrollo.

Además se debe nivelar el terreno para que sea uniforme, y  evitar así encharcamientos. La incorporación de materia orgánica y arena también es importante, para facilitar el aporte de nutrientes y la infiltración del agua, respectivamente. Finalmente, deben realizarse surcos donde se colocarán los bulbillos.

Siembra

Se habla de siembra cuando se utiliza la semilla botánica o semilla sexual; pero en este caso se utiliza como material de propagación los mismos bulbillos; los cuales son la “semilla” asexual, por lo que hablamos de plantación. En la plantación de la Chalota, los bulbillos deberán estar completamente sanos y tener buenas características comerciales o deseables; tales como buen desarrollo, rendimiento, libres de patógenos y enfermedades, entre otras.

La siembra de la Chalota

Distancia de siembra

La distancia recomendable es de aproximadamente 15  cm entre plantas y 40 cm entre surcos

Riego

El riego debe ser moderado y debe evitarse el aguachinamiento, ya que las hortalizas como la Chalota, no toleran los excesos de humedad; son muy susceptibles a pudriciones, entre otras razones.

Abonado o fertilización

Como abono se puede aplicar al suelo cenizas provenientes de la quema de troncos de maderas, pero que estén lo más secas posibles.

Al comenzar la emergencia de las primeras hojas, conviene fertilizar con nitrógeno (el nitrógeno propicia un buen desarrollo de las partes vegetativas de las plantas) y fósforo. Se requiere que el suelo esté húmedo lo suficientemente hasta por lo menos 40 cm de profundidad durante el ciclo de crecimiento de la planta, y hasta que comiencen a secarse sus hojas.

Es en esta etapa que debe suspenderse el riego, para así permitir que el suelo se seque y de este modo facilitar la cosecha. En caso de permanecer húmedo el suelo, aún cuando los bulbillos ya están maduros, se pueden producir pudriciones en la raíces.

La cosecha

El observar la parte aérea de la planta parcialmente seca y doblada hacia el suelo es un indicativo de que ya se debe realizar la cosecha.

Previamente a la cosecha debe realizarse un procedimiento conocido como el “pisado”, igual como se realiza en el cultivo de la cebolla y el ajo, el cual consiste en torcer las hojas para estimular los bulbos a que tomen mayor fuerza y desarrollo. Luego de la recolección se debe retirar del suelo la planta con sus bulbos. Una planta de Chalota con un desarrollo normal puede obtener hasta diez bulbos.

En la misma cosecha es conveniente realizar la selección de los bulbos de la próxima plantación. Se deben seleccionar los que han tenido un mejor desarrollo y comportamiento.

El curado

El “curado” permite que se seque completamente el bulbo. Consiste en ubicar los bulbos cosechados, en un sitio bien ventilado y seco.

Plagas y enfermedades que pueden afectar al cultivo

Los nemátodos son plagas importantes en el cultivo de la Chalota, sean de tallo o de bulbo. En caso de ataques de este tipo, se deben aplicar productos nematicidas. Los ácaros y trips también son plaga importante en esta especie, y pueden controlarse con aceite emulsionable o  mineral, u otros productos específicos.

En cuanto a enfermedades en la Chalota, son importantes la roya Puccinia porrii y el mildiu Peronospora destructor; que igualmente puede ser controlado con fungicidas específicos. Otras enfermedades de menor incidencia son la Alternariosis, el hongo Esclerotinia, y también algunas enfermedades producidas por virus.

Nos despedimos dejándote este entretenido y educativo video.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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